Coatepec encierra algo muy especial y único en México, sus orquídeas, somos un pueblo rico en costumbres y tradiciones, donde estas singulares flores han formado parte de esa vida cotidiana de sus pobladores a través del tiempo.
Las orquídeas las encontramos en costumbres tan míticas como los altares del día de muertos, o en celebraciones tan especiales como las bodas.
Así al recorrer sus calles, no sólo podemos admirar sus imponentes construcciones, sino alimentar nuestro espíritu observando esos jardines centrales donde se cultivan orquídeas, o caminar sobre su parque principal y admirar su colección de orquídeas, que ha logrado constituirse como el segundo orquideario de México.
Y que decir de su Museo de la Orquídea, un lugar que alberga una colección de cinco mil ejemplares de especies, que la han catalogado como una de las colecciones más importantes de México y Latinoamérica.
De esta pasión por cultivar orquídeas, que se ha ido transmitiendo de generación en generación, hay un sentimiento tan especial como las mismas flores, el amor por conservar la naturaleza, el don de la paciencia por esperar años y mirar la primera floración, y la oportunidad de la convivencia de un pueblo entorno a ellas.
Esto sólo se vive en Coatepec, quienes nos visitan, tienen la oportunidad de ser parte de esa magia y llevarse una experiencia de vida, por que eso, significa el amor por las orquídeas en Coatepec, una historia de vida.
Así, como el Genuino Café Coatepec ha dado la vuelta al mundo, las orquídeas de Coatepec no sólo han dado la misma vuelta, sino están presentes en el mundo, desde los recorridos del barón Alexander Humbolt por la región de Coatepec, se describieron las primeras especies del nuevo mundo que fueron llevadas a importantes colecciones como la del Real Jardín Botánico de Kew en Londres, donde a través de cientos de años, han dado testimonio de la riqueza biológica, histórica y cultural de un pueblo que con su magia, no sólo han conservado vida, sino la han hecho una forma de vida.
Coatepec, con su café y sus orquídeas, te hacen olvidar el tiempo, despertar tus sentidos, alimentar tu espíritu, y saber que aún hay esencias de la vida que con el correr del tiempo no se pierden, por el contrario, se heredan y además se comparten.
En Coatepec, podemos decir que cuanta razón tenían en la antigua Grecia donde a las orquídeas se les atribuían propiedades curativas y afrodisíacas, pues sin duda, las orquídeas de Coatepec, curan el alma y despiertan un deseo fuerte, provocado por la seducción de la variedad de sus colores, formas y aromas, despiertan como el mismo Coatepec el deseo de quedarte a vivir en él y tener por compañeras de vida a las orquídeas.